Crenshaw. El gato invisible de Katherine Applegate

Título original: Crenshaw
Autora: Katherine Applegate
Saga: -
Género: Middle-grade
Editorial: La Galera
Traductor: Marcelo E. Mazzanti Castrillejo
Edición: Octubre de 2016
Nº páginas: 272 páginas
Mi puntuación: ★★★★★

Me llamo Jackson y en otoño empezaré quinto de primaria. Cuando sea mayor quiero ser científico de animales. 
¿Sabías que un guepardo puede correr a 110km/h? ¿Que una cucaracha sin cabeza puede sobrevivir dos semanas? ¿O que cuando un lagarto cornudo se enfada escupe sangre por los ojos?
Honestamente, creo que los hechos son mucho mejor que las historias. No puedes ver una historia. No puedes sostenerla en tu mano para medirla. De hecho, las historias no son más que mentiras. Y a mí no me gusta que me mientan.
La regla número uno de todo científico es que siempre hay una explicación lógica para todo. Por ejemplo, ¿cómo aparecen gominolas moradas por arte de magia cuando apenas tenemos comida en casa? O, ¿por qué es difícil hacer amigos cuando siempre tienes hambre? O, ¿de dónde ha salido ese ridículo paraguas? O, ¿cómo es posible que mis padres crean que no me doy cuenta que discuten cuando llegan las facturas?

Pero, lo más importante es que tiene que haber una explicación lógica de por qué el amigo imaginario que me inventé hace años ¡se está pegando un baño de espuma en nuestra bañera!

Hacía tiempo que sentía curiosidad por esta autora, concretamente desde que publicó El único e incomparable Iván, libro que estoy deseando leer pero con el que aún no he podido hacerme. Por eso, cuando supe que La Galera publicaba Crenshaw (gracias Alex de ¿Dónde está mi lápiz? por darme este dato), no pude resistir la tentación y contacté con la editorial. 

Jackson es un niño muy maduro para su edad. El cree en los datos y en todo lo que se pueda comprobar mediante estos. Las historias y la magia no van con él, nada más que mentiras y no le gusta nada que le mientan. Por eso este pobre niño cree haberse vuelto loco en cuanto empieza a ver un gato alto y con gorra. Enseguida recordará que se trata de Crenshaw, su amigo imaginario de cuando contaba solo 7 años que por algún motivo ha vuelto. Solo que esta vez es mucho más grande.

Con una prosa dulce e inocente como puede ser la de un niño, la autora nos narra una situación por la que, lamentablemente, muchas familias están pasando hoy en día y empatizamos fácilmente con el pequeño protagonista y sus sentimientos. Su aversión a tener que abandonar su hogar, sus amigos, su colegio y tantas otras cosas que, pese a ser perfectamente consciente de la situación de su hogar, a el le habría gustado intentar conseguir. 

A medida que Jackson nos va narrando la situación que está atravesando su familia a la vea que recuerda una situación similar en el pasado por la que no quiere volver a pasar, nos es muy fácil darnos cuenta del porqué Crenshaw ha vuelto a su vida.

Toda la narración por parte de Jackson viene aderezada con un montón de datos sobre animales, como gatos, perros o muerciélagos. Datos muy interesantes que el conoce puesto que de mayor quiere ser científico de alguno de estos animales.

La edición de La Galera es preciosa, en tapa dura y con la imagen de Crenshaw en varias páginas y en distintas posiciones. Además del detalle de la numeración de las páginas. He quedado enamorada del cariño con el que se ha editado este libro que se lee de una sentada.

Crenshaw nos habla de la importancia de creer en la magia cuando somos pequeños y, sobretodo, de la importancia de los amigos invisibles, los cuáles acuden siempre cuando más los necesitas. Me ha parecido una lectura perfecta tanto para los más pequeños como para adultos.