El chico de la última fila de Susanna Herrero

Título original: El chico de la última fila (2020)

Autora: Susanna Herrero
Saga: Cabana #2/5
Género: Romántica
Editorial: Autopublicado
Traductor: -
Edición: Enero de 2020
Nº páginas: 438 páginas

Mi puntuación: ★★★★☆

¿Quién es Dylan Carbonell? ¿Ese chico indescifrable, de sonrisas invisibles y miradas impactantes, que copa las revistas y los medios de comunicación? ¿Un genio de la música? ¿La nueva promesa del rock and roll español? «Subí las escaleras que daban acceso al escenario y me di de bruces con los miles de rostros que me esperaban, impacientes por escuchar el concierto de su vida. Todos ellos me deseaban de alguna manera. Mi cuerpo. Mi mente. Mis manos en los trastes de la guitarra. Todos, menos uno: Hugo Cabana, que me observaba desde abajo con pereza. Cuyas primeras palabras hacia mí no fueron felicitaciones por el espectáculo que acababa de ofrecer ni alabanzas sobre mi físico. Me resultó increíble, porque yo soy Dylan Carbonell, un guaperas. Impactamos. Hugo y yo impactamos. Y fue el fin del silencio». Un concierto de rock and roll. Dos chicos. Uno, el cantante. Otro, el que acude para acompañar a sus amigos. Y el Mediterráneo esperando. El sol. Una pendiente muy inclinada y dos bicicletas. Una piscina y cabellos mojados sobre la frente. Miradas que se sostienen. Una tabla de surf y…¿Quién es el chico de la última fila? PORQUE NO EXISTE DISTANCIA SI TÚ ERES EL CAMINO.

La verdad es que con este libro no lo tenía demasiado claro. Como ya os conté aquí, la pareja del primero no me entusiasmó pero sí me dejó con muchas ganas de saber más del resto de los hermanos Cabana, pues Susanna casi sin proponérselo creó un grupo de hermanos de lo más pintoresco y atrayente. Si River o Marcos hubieran sido los protagonistas del segundo libro sé que este hubiera caído enseguida, pero este libro estaba dedicado a Hugo y al darme cuenta de quién sería su pareja empecé a dejar pasar el tiempo…

No es ningún secreto que este tipo de literatura me ha dejado con algún que otro desengaño, más que nada porque no dejamos de caer en los mismos clichés y estereotipos una y otra vez, terminando con el cuadro de un pareja que no puedo reconocer en absoluto y eso siempre hace que estas historias tengan ese toque “absurdo” para mí. Por suerte, no ha sido así con la historia de Susanna.

Hugo se ha escapado a Madrid como cada año junto a sus antiguos compañeros de Universidad. La última noche de sus vacaciones deciden acudir al concierto de una de las estrellas del momento Dylan Carbonell, aunque Hugo no se imagina como va a cambiarle la vida el plan de esa noche.

Algo que tuve claro con la lectura de Aquel último verano fue que las historias de River y Marcos me iban a encantar, pero que los libros de Hugo y Adrián me iban a costar bastante más leerlos por su forma de ser. Imaginaros mi sorpresa cuando empiezo esta historia sin tenerlas todas conmigo y acompañando al carácter especialito de Hugo, que no termina de encajarme del todo, me plantan a un Dylan con tanto gancho que ha conseguido que incluso Hugo empiece a gustarme, aunque tengo claro que me quedo con el cantante, pues nunca jamás he conocido a alguien tan radical y esporádico como él y sé que si me lo encontrara en la vida real me pondría de los nervios, en cambio en este libro Susanna ha hecho magia y el conjunto completo consigue que te encariñes con Dylan, incluso por encima de algunos Cabana. Nótese que se ha convertido en uno de mis personajes favoritos (a día de hoy llevo leídos los cuatro libros publicados hasta el momento). Muchas veces no le ves el sentido a sus decisiones o incluso llegan a parecer absurdas, pero la realidad es que el personaje es coherente desde el principio hasta el final, él hace lo que quiere en el momento que lo siente.

Seguramente de lo más interesante de ver son las relaciones que se forman entre los Cabana y los cuñados, sobre todo estos últimos cuando vemos claramente como no solo surge su relación amorosa con uno de los hermanos, si no que cada Cabana “acoge” a un cuñado/a bajo el ala. Y es especialmente interesante de ver cómo la autora da pinceladas de lo que veremos en La última noche que vi llover en ese sentido. A Dylan le surgirá una mejor amiga que no será del agrado de la familia pero es una amistad muy divertida de leer. 

Como ya hizo en el primer libro, Susanna va incorporando retazos del pasado de los dos personajes, mostrándonos donde estaba cada uno en ciertos momentos clave y aunque puede parecer que los de Hugo no tienen importancia, en realidad sirven para perfilar aún mejor el personaje de Dylan, pues la infancia complicada que ha tenido aún destaca más al mostrarla al junto a la infancia feliz de Hugo.

El primer libro no me maravilló y con este no las tenía todas conmigo, en parte por eso me sorprendió tanto y consiguió dejarme con ganas de seguir conociendo a los Cabana. Si os gusta la romántica os recomiendo muchísimo estos libros ya que son rápidos de leer y los personajes os encandilarán, pues Susanna los ha dotado de personalidades muy distintas, pero redondas todas ellas.

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