No es un parón definitivo pues, como dicen en mi casa, para cabezona yo, pero si que cada vez tengo más claro que o paro las entradas y empiezo a devolver comentarios o finalmente optaré por abandonar algo que en realidad me encanta. Seguro que todos habéis vivido uno de estos momentos en los que la vida se hace bola y parece que la única salida es renunciar a algo que os encanta... y yo por el momento me niego a planteármelo siquiera.
Por el momento voy a tomarme un par de semanas, quizás terminen siendo tres o quizás cuatro; todo dependerá del pajarillo lector y de los estudios (sí, es que mi yo del pasado me creyó Superwoman o algo), pero lo que tengo claro es que hasta que no esté casi al día con comentarios y tenga unas cuantas entradas en la recámara, no voy a volver a publicar, así que empezaréis a verme por vuestros blogs, pero este permanecerá parado, espero que por poco tiempo.